Para obtener nuestro aceite de canola refinado, las semillas pasan por un cuidadoso proceso de limpieza y prensado, seguido de una etapa de refinación que asegura pureza, estabilidad y un sabor neutro. De esta forma, logramos un aceite versátil, ideal tanto para la industria alimentaria como para el consumo diario, con un perfil nutricional balanceado y naturalmente rico en ácidos grasos esenciales.

